17 marzo, 2009

19 días y una Semana.



Ya viene, ya se acerca,
Ya se vé,

Palabras que se dicen en los dos mejores tiempos de Sevilla; Cuaresma y Semana Santa.
19 días, en los que se funden los dos tiempos, en el que Sevilla es Jerusalén del Siglo XXI.

19 días para que veamos Jesús en su esplendor en la Sagrada entrada en Jerusalén, en las que los niños juegan sobre la "rampla" de nuestros sueños, en la que nosotros también jugabamos a Nuestros juegos de Hermandad.

Ya Viene...
Tras la esquina esperamos que aparezca el sublime Misterio de Santa Marta, obra cumbre de dos grandes genios, Luis Ortega Bru y Sebastian Santos Rojas, el arte y la sevillanía, paseados con elegancia.

Martes de Dolores, dolores desde el Cerro hasta Santa Cruz, en la que María se cubre de Gracia y Amparo y bendecimos su Dulce Nombre, en la que las promesas de Los Estudiantes que descalzan sus pies para quitar sus Penas.

Ya se acerca...
El Misterio de la calle Orfila, ¡Pero de donde sale ese barco, con Olivo incluido¡ ¡SI no hay espacio en su capilla¡, milagros de la Semana Santa, que nos maravillan igual que cuando fuimos niños. Cristo, herido de una "lanzá" pasando por El Salvador nos demuestra su Buen Fín, enseñandonos que hasta en su muerte hay Piedad, Misericordia y Caridad.

Tarde de Jueves Santo, lleno de Pasión, Ángeles que vienen a Sevilla. Mas, Señor de la Oración, no viertas tu sangre y Lágrimas por tu Pueblo, que te rezan el Rosario en tu Barrio de la Feria. Valle de Sevilla, que cargaste con tu Cruz al Hombro y sufriste tu Quinta Angustia, deja de sufrir y ruega nosotros.

Ya se Vé...
La Macarena por Cuna, con los primeros rayos de Luz, que mayor Luz que Ella no hay ninguna. Gran Poder bendito, danos Salud y a recordar por qué diste tu vida en el Calvario. Silencio, Silencio, Silencio que ya viene Triana, ya viene Triana, por el puente, con su gente, para conquistar Sevilla con su corazón Marinero, que en Tres Caidas nos llena de Esperanza.

Viernes Santo, tarde de Cruz, tarde de nubes... y que sustitos nos dá más de un año.
El Cachorro muere en en el Puente, porque no puede Ver a su Triana, ni a Sevilla, que solo mira el cielo. Y Jesús Nazareno cae en San Isidoro y se levanta, dolorido en Castilla. ¡Soledad¡, dame tu mano y Conviertenos en Montserrat.

Sábado Triste, ya se acaba, Cristo, Yacente nos demuestra su divina Providencia. Y por la Noche mientras María sufre en Soledad, que en verdad no lo está, porque Sevilla te acompaña. Entonces Jesús demuestra sus Cinco Llagas porque ya ha Resucitado en La Salle a la Aurora del Día.

Bendita Seas Sevilla por ser como eres.
Texto: Guillermo Ramírez Torres.

Fotografía: Guillermo Ramírez.

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